21 de marzo de 2020

LOS GÉNEROS DRAMÁTICOS EN EL SIGLO DE ORO, SEGÚN LUIS ALFONSO DE CARVALLO EN "CISNE DE APOLO".


Luis Alfonso de Carvallo, en el "Cisne de Apolo: de las excelencias y dignidad y todo lo que al Arte Poética y versificatoria pertenece " (1602) nos ofreció estas reflexiones sobre los géneros dramáticos, en el diálogo tercero, concretamente entre los parágrafos 2 a 6.

§ 2. De cuántas maneras son las poesías, y lo que es narración y concepto, dragmática, exagemática y mixta.


(...) Lectura.- Dragmática poesía es aquella que los latinos llaman activa, imitativa o representativa, en la cual nunca el poeta habla en su nombre, pero induce personas que hablen y representen el mismo caso, de cuyo género de poesía son las comedias, tragedias, coloquios, diálogos y algunas églogas. (...)


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§ 3. De la poesía Dramática y de la comedia.


Carvallo.— De esas tres maneras de poesía, ¿cuál es más propria de los poetas?
Lectura.— La dramática, porque la exagemática más propria es de los doctores, y la mixta de los historiadores, pero la dramática principalmente pertenece a los poetas, por lo cual será bueno que comencemos por la comedia.

Zoilo.— Si el verla representar es perder tiempo mal perdido, no será menos el oír tratar della.

Lectura.— No tienes razón, porque la comedia es una imitación de la vida, espejo de costumbres, imagen de verdad, como dice el famoso orador en estas palabras: Comedia es immitatio vitae, speculum consuetodinis et imago veritatis.

Carvallo.— ¿Por qué la llaman comedia?

Lectura.— Dícese deste nombre griego como: es lo que en latín pagus, pagi, que quiere decir la heredad, porque los mancebos de Atenas antiguamente iban con este ejercicio por las aldeas, campos y heredades, alabando a Dios después de haber cogido los fructos.

Zoilo.— Entendí que por tratar alguna cosa de comer se llamaba comedia, que no está pared en medio de comida.

Lectura.— Pues algunos hay que quieren se derive de este nombre como, y que significa comida, porque en ellas se representaban las comedias.

Carvallo.— ¿Quién fue, si sabéis, el primero inventor de este ejercicio?

Lectura.— Eupole, Cratino y Aristófanes, dice Ascencio, capítulo 6, que fueron los que primero dieron en este ejercicio, aunque no en el estilo dramático que ahora tienen, sino el exagemático, alabando a Dios y dándole gracias por los divinos beneficios y fructos cogidos, como dice el proprio Ascencio, capítulo 5, en los prenotamentos de Terencio. Después desto comenzaron a describir en ellas las vidas de los hombres, y mostrar los varios sucesos de la vida humana. Y después vinieron otros poetas que las pusieron en estilo dramático y representativo, yendo con el tiempo perfeccionándose, como las demás cosas. Su propria materia, después de puestas ya en buen estilo, fueron las fábulas y ficciones semejantes a verdad.

Zoilo.— Y eso ¿no era mentir?

Lectura.— Ya queda eso muy averiguado, mas ya ahora se hacen comedias de historias ciertas, así profanas como divinas, y aun de personas físicas, que ansí las quiero llamar a las que de suyo son espirituales o intelectuales, no tienen al fin figura de persona, y debajo della se representa, como es la paciencia, fortaleza, o alguna otra virtud o vicio, o la persona de una ciudad, río o pueblo, de que todo hay ya representaciones. Y el meter estas personas, llamándolas por sus nombres, se llama inducir. Pero cuando debajo de unos personajes se entienden otros alegóricamente, se llama introducir, como hizo Salomón en los Cantares, que introduce las personas de un esposo y una esposa, por el esposo entendiendo a Cristo, y por la esposa significando la Alma. Pero si los pusiera en sus proprias personas, no se dijera sino inducir, como anotó bien el Padre Fray Luis de León.

Carvallo.— Paréceme será bueno recoger lo que se ha dicho, antes que me paséis más adelante.

« Es la comedia espejo de la vida, imagen de verdad, de Eupole hallada, dando gracias a Dios introducida por los fructos, de donde así es llamada; o de como se dice, que es comida, por ser en los convites muy usada; fueron materia fábulas inciertas, y agora historias físicas o ciertas».


§ 4. De las tres partes principales de la comedia, que son próthesis, epítasis y catástrophe, y de la loa o introito.


Carvallo.- Pues nos habéis dicho la etimología, principio y materia de la comedia, decidnos, si no os cansáis, alguna cosa de su disposición y forma.

Lectura.— Si comprehender quisiésemos todo lo que a la comedia pertenece a su traza y orden, mucho había que decir, y sería nunca acabar el querer decir los subtiles artificios y admirables trazas de las comedias que en nuestra lengua se usan, especialmente las que en nuestro tiempo hacen con tan divina traza, enriqueciéndolas de todos los géneros de flores que en la poesía se pueden imaginar. Y porque de esta materia será mejor no decir nada que decir poco, sólo diré lo que común y generalmente debe tener la comedia, que son tres partes principales en que se divide, las cuales llaman en griego prótasis, epítasis y catástrofe, que son como en todas las cosas humanas la ascendencia, existencia y decidencia, porque la prótasis es el principio y crecimiento de la comedia, en la cual se comienza a ir representando la historia o ficción, de modo que vaya comenzando cosas y no acabando ningún suceso, más antes ir entablándolos de tal modo que no se puedan fácilmente coligir los no pensados fines dellos. En la epítasis, que es la segunda parte, como existencia de la comedia, hase de proseguir la materia con diferentes sucesos de los que se pudieran pensar, y otros varios y revueltos casos, como haciendo ñudos, procurando tener siempre el ánimo de los oyentes suspenso, ya alegres, ya tristes, ya admirados, y con deseo de saber el fin de los sucesos, porque cuanto esta suspensión y deseo fuere mayor, le será más agradable después el fin, por serlo siempre lo que es más deseado. Es la tercera parte catástrofe, cuando la comedia va declinando para acabarse, y en ella todos estos enredos se van descubriendo y conociendo por modos muy diferentes y extraordinarios de lo que imaginarse pudiera, y no milagrosos, que llaman máquinas, que serán contra doctrina de Aristóteles. Irá sucediendo todo en cosas de gusto y contento, y en agradables fines, los cuales tanto más lo serán cuanto en los principios hayan sido dudosos y revueltos, como el sol después de la tempestad parece más claro; a esto llaman soltura de la fábula. Y aunque éstas son las partes principales que en sí tiene la comedia, con todo eso se suele dividir en cuatro o cinco jornadas. Pero lo mejor es hacer tres jornadas sola mente, una de cada parte de las principales.

Carvallo.— ¿A qué llamáis jornadas?

Lectura.— Jornada es nombre italiano; quiere decir cosa de un día, porque jiorno significa el día. Y tómase por la distinción y mudanza que se hace en la comedia de cosas sucedidas en diferentes tiempos y días, como si queriendo representar la vida de un santo hiciésemos de la niñez una jornada, de la edad perfecta otra, y otra de la vejez. A estas jornadas llaman los latinos actos, Horat(io). in Poet(ica)., y tiene cinco cada comedia. Estas jornadas se dividen en escenas.

Carvallo.— Paréceme que no has tratado de la loa o prólogo de la comedia, que otros llaman introito o faraute, habiendo tratado de las partes de la comedia.

Lectura.— Ése, a mi opinión, no es parte de la comedia, sino distinto y apartado, y así diré ahora lo que dél se puede decir. Al principio de cada comedia sale un personaje a procurar y captar la benevolencia y atención del auditorio, y esto hace en una de cuatro maneras. Comendativamente: encomendando la fábula, historia, poeta o autor que la representa. El segundo modo es relativo, en el cual se zahiere y vitupera el murmurador, o se rinde gracias a los benévolos oyentes. El tercero modo es argumentativo, en el cual declara la historia o fábula que se representa, y éste con razón en España es poco usado, por quitar mucho gusto a la comedia sabiéndose, antes que se represente, el suceso de la historia. Llámase el cuarto modo mixto por participar de los tres ya dichos; llamáronle introito por entrar al principio, faraute por declarar el argumento, y ahora le llaman loa por loar en él la comedia, al auditorio o festividad en que se hace. Mas ya le podremos así llamar, porque han dado los poetas en alabar algunas cosas como el silencio, un número, lo negro, lo pequeño y otras cosas en que se quieren señalar y mostrar sus ingenios, aunque todo debe ir ordenado al fin que dije, que es captar la benevolencia y atención del auditorio. Y para esto podrían usar de las partes que suelen los Retóricos usar en sus exordios.

Carvallo.— Recojamos, según solemos, lo dicho, que luego pasaréis adelante.

« Es la comedia siempre dividida
en prótesis, do va siempre creciendo,
y estando ya entablada y conocida,
va, epítasis, los casos resolviendo;
en catástrofe es siempre fenecida,
los casos y marañas descubriendo;
en la loa procura con prudencia
silencio, quietud, benevolencia. ».


§ 5. Los provechos y utilidades de la comedia.


Zoilo.— Cosa por cierto me parecen más de entretenimiento que de provecho la comedia, y donde más se destruyen que se reforman las costumbres, pues en ellas le pierde el tiempo que podrían emplear en otras cosas, y se dan los hombres al ocio y pasatiempo, y tienen ocasión los hombres de comunicar sus voluntades con las mujeres, y con los malos ejemplos que se representan se inflaman y enciende los ánimos juveniles, y con los torpes meneos y hábitos deshonestos sin citarlos malos pensamientos, por lo cual justamente fueron vedadas antiguamente y en nuestro tiempo prohibidas.

Lectura.— Si el principal intento y fin de la comedia fuese causar esos daños razón te sobraría, pero fáltate, pues en ella falta ese intento, llámasla entretenimiento. Y siendo tan lícito y honesto permitido es por leyes divinas y humanas para descanso de los hombres, que no pueden estar siempre intentos al trabajo; y no se pierde el tiempo que en descansar se gasta, pues se vuelve con mayores alientos al trabajo, los cuales del todo faltarán de otra suerte; la ocasión que tienen los hombres de verse allí con las mujeres, lo mismo si quieren ser malos pueden hacer en las iglesias, donde con menos nota les pueden hablar; malos ejemplos ninguno los representa, pues son muy vistas y consideradas antes que al teatro salgan; ni tampoco en ellas se permiten torpes ni deshonestos hábitos y meneos; ni se deben prohibir por el gran provecho que causan a las repúblicas, pues allí se alaba y ensalza el bueno para que sea imitado, y el vicioso se vitupera para que naide le imite; allí se leen los varios sucesos y acaecimientos de nuestra miserable vida; allí se conocen los desastrados fines y subcesos de los viciosos, y los prósperos de los virtuosos; allí se halla mucho mal que cuitar; allí, como en el espejo, se hecha de ver la ignorancia del niño, la crianza del muchacho, el provecho del estudio, la vanidad del mozo, la avaricia del viejo, la liviandad de la mujer, el engaño de la ramera, la constancia de la valerosa; al fin, es espejo de las edades, de todas las costumbres, de todas las naciones y de todos los estados; es cátedra donde se leen todas facultades, todas ciencias, todas artes y todo lo necesario para vivir sin peligro de la vida, como consta de otra definición de la comedia, que dice: "comoedia est privatae ciuilisque fortunae sine periculo vitae comprehensio" [definición de Teofrastro, que pasó a Diomedes: "la comedia comprende sucesos civiles y privados sin peligro para la vida"]. Que la comedia es una cifra y mapa de la fortuna, ansí de la persona particular como de toda la república, sin peligro de la vida. Y aunque algunos entienden que aquel "sine periculo vitae" es por diferenciarla de la tragedia, yo lo entiendo de otra suerte, porque no se entiende sino respecto del provecho que trae la comedia para pasar la vida sin peligro, como si dijera es una cifra para vivir los pueblos y particulares sin peligro de la vida. Y no vendrá fuera de propósito un cuento que (a)cerca del provecho que de las comedias resulta he oído, y es que cierto celoso por tener la mujer de mediana hermosura no la consentía ir a la comedia y él jamás faltaba de ella. Y la señora determinó tener también su entretenimiento, y mientras el marido Lectura.— Tragedia resta ahora que digamos, la cual en su disposición y forma no se diferencia de la comedia, porque de las mismas partes consta. Pero la materia es diferente, porque acaba en cosas tristes y lamentables habiendo al principio comenzado en cosas alegres y suaves, y de ordinario es de personas heroicas y famosas, abatidas por la fortuna, como de su difinición consta, que es ésta: tragoedia est heroicae fortunae [in adversis determinata] comprehensio [definición de Teofrastro, que pasó a Diomedes: "la tragedia es el suceso catastrófico de un destino heroico"].

Carvallo.— ¿Por qué la llaman así?

Lectura.— Horacio en la Poética parece que siente llamarse ansí de este nombre tragos, que significa cabrón, y oda, que significa el canto, porque antiguamente se cantaban y daban un cabrón de premio a los que en este ejercicio más se señalaban, y otros afirman que se diriva de este nombre trega, que era cierta tintura con que se tintaban las caras antes que Tespis inventase las máscaras de que después usaron.

Carvallo.— ¿Y quién fue su primero inventor de las tragedias?

Lectura.— Esquilo, poeta de Tarsis, según afirma Mosén Narcís en sus crónicas. Otros piensan que Tespis fue su inventor, coligiendo de Horacio in Poet.(ica). Pero lo cierto es que cuando se inventaron las comedias, se inventaron las tragedias, y por los mesmos inventores, y los demás las fueron perficionando y reduciendo a buen estilo.

Carvallo.— ¿A qué llaman auto?

Lectura.— Lo mismo es que comedia, que del nombre latino acto se deriva, y llámase propriamente auto cuando hay mucho aparato, invenciones y aparejos, y farsa cuando hay cosas de mucho gusto, aunque se toma comúnmente por la propria compañía de los que representan. Al fin comedia se llama escrita, auto representada, y farsa la comunidad de los representantes.

Carvallo.— Y coloquios, ¿qué son?

Lectura.— El coloquio especie es de comedia, pero no tiene más de hasta seis personas que disputan y hablan sobre alguna cosa, y no tiene más de un acto, porque jamás el teatro se deja solo, que al fin no es más que una conversación, y así se llama coloquio de colloquor, que es por hablar algunos entre sí. También es exagemático estilo el diálogo, que es plática entre dos, o a lo sumo tres. En este estilo escribe el orador su libro De amicitia, porque habiendo de tratar cómo ciertos amigos se habían ajuntado a tratar della, por evitar el díjele y díjome lo reduce a diálogo, como él proprio confiesa. Y en este estilo se ponen y enseñan muchas y muy buenas doctrinas. Y esto baste de la poesía dramática, y copiándolo pasemos a la exagemática.

« Conforme a la comedia es la tragedia, pero fenece en cosas lastimosas, que en esto es diferente la comedia, que tiene heroicas hazañas y famosas; de trega o tragos dijóse tragedia; es el coloquio de menores cosas, que sola una disputa a tener viene, y el diálogo a dos o tres conviene».




BIBLIOGRAFÍA.-

Porqueras Mayo, Alberto. "Las ideas sobre el teatro de L. A. Carvallo en su "Cisne de Apolo" (1602), in Ferrer Valls, teresa, et Diago, Neil (coords.). Comedias y comediantes : estudios sobre el teatro clásico español : actas del congreso internacional sobre teatro y prácticas escénicas en los siglos XVI y XVII, organizado por el Departamento de Filología Española de la Universitat de Filología. Barcelona: Universitat, 1991, pp. 307-320.







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